La mejor decisión
Me encontraba en un punto crucial en mi vida, con muchas metas, sueños y planes por llevar a cabo. Tenía en ese tiempo una pareja que lejos de aportarme para bien, me mantenía muy mal. Justo al mes de relación decidí terminar con eso y ahí es cuando me doy cuenta de que tengo tres semanas de embarazo, yo no me explicaba cómo, pues nos cuidábamos muy bien, o al menos eso creía... Les conté, dolorosamente, a mi familia y amigos cercanos quienes me apoyaron y me di cuenta de la gran fortaleza y valor como mujer y ser humano que tengo.
Resulta que la pareja que tenía en ese tiempo había decidido romper el condón para mantenerme a su lado con un hijo. Cosa deleznable y realmente triste. Decidí interrumpir el embarazo y encontré un médico que me ayudó mucho, fue un proceso rápido y lleno de aprendizaje. Lo más curioso del caso es que justo a la semana que pasé por todo esto, una de mis mejores amigas pasaba por lo mismo, entonces en mí encontró refugio, ayuda y orientación. Pude apoyarla y comprenderla de corazón.
Abortar es una decisión que te llena de aprendizaje. Ahora me encuentro muy feliz y satisfecha cumpliendo mis metas y sueños, comprometida conmigo misma y con la vida.
Autora: 25 años, Ciudad Juárez Chihuahua